A dos años del gobierno encabezado por el Dr. Rubén Rocha Moya no hay duda de la identidad con la Cuarta Transformación y el presidente Andrés Manuel López Obrador en materia de política de bienestar. Por ello, uno de los ejes rectores que se encuentran en su Segundo Informe es el valor que dicho gobierno le da a la máxima de que ‘Por el bien de todos, primero los pobres’. Lo afirmamos, por sus contenidos, no solo porque ha mantenido coordinación plena con las diferentes instancias del Gobierno federal y, por supuesto, con la Presidencia de la República, lo que se expresa por la atención que el presidente ha dado al estado, no solo en la inversión, sino en sus frecuentes visitas a Sinaloa.
La joya de la corona en materia de bienestar social sostenible de la administración federal actual es, sin duda, la disminución de la pobreza de un 28.1% en 2020, a 21.6% en 2022, es decir, una reducción de 6.5 puntos porcentuales, periodo que parcialmente corresponde al gobierno de Rocha Moya. En números totales representa 185 700 personas que han dejado el umbral de la pobreza en el estado. Esto deja a Sinaloa entre las 7 entidades federativas con menos población en situación de pobreza.
En cuestión de infraestructura, en Sinaloa se ejercieron en 2023 un total de 1500 millones de pesos, con 44 obras en progreso cuyo beneficio será para cerca de 700 mil habitantes, destacando las de acceso al agua potable, alcantarillado y electrificación.
También ha habido apoyo para las comunidades indígenas en la búsqueda de una verdadera inclusión. Es por ello que se ha ayudado a la conservación de 28 centros ceremoniales a lo largo del estado. Además, se han asignado 30 millones de pesos para la promoción de sus culturas, bienestar social y la preservación de su identidad. En Sinaloa se reconoce la existencia de 246 comunidades indígenas, donde se han promovido talleres para la preservación de la lengua acorde a cada comunidad.
La atención a grupos vulnerables es una cuestión prioritaria para el Gobierno estatal: se aprobó un presupuesto de 300 millones de pesos para el Programa Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente, programa insignia de este gobierno, ya que Sinaloa fue el pionero en ello, proponiendo a la Federación firmar en primer lugar el convenio respectivo. De igual forma se atendió a diversos grupos de jornaleros en distintos municipios en variedad de frentes: ayuda humanitaria, apoyo legal y de asistencia social.
A esto se incluyen los diversos apoyos que de manera inmediata se dio a la población que fue víctima de desastres naturales, sin esperar a que la Federación declarara las respectivas zonas de desastre. No olvidemos el apoyo de 600 millones de pesos para fortalecer la comercialización de maíz en el ciclo pasado, programa inédito y único en todo el país.
En el plano educativo, Sinaloa también avanza en la implementación de la Nueva Escuela Mexicana, que a pesar del corto tiempo ha visto resultados en la eficiencia terminal, pues en educación básica ya se cuenta con un 98.2% y en el nivel medio superior del 98.8%. Mientras que en cobertura se tiene en nivel preescolar el 73.3%; primaria 97.9%; secundaria del 93.5%; media-superior del 84.7% y en educación superior 46.2% (cuarto lugar nacional). También se han destinado más de 317 millones de pesos para una intervención en 315 planteles del estado.
En materia de salud se tiene como eje la promoción de la prevención, protección contra riesgos sanitarios y adicciones. Por ello se ha impulsado ampliamente la atención de la salud de la mujer, con cuidados especiales en el embarazo y seguimiento en el cáncer de la mujer, registrando una tendencia a la baja de la mortalidad por estos factores del 60%.
En materia de infancias se ha fomentado la vacunación, logrando una cobertura del 86.4%, manteniendo a la baja la mortalidad infantil. Mientras que para adultos mayores se motiva a la actividad a las personas, y se capacita a los médicos para darles una mejor atención.
El programa de basificación gradual a personal de contrato del IMSS Bienestar se suman un total de 500 trabajadores con una inversión de 92 millones de pesos, además de la rehabilitación, conservación y mantenimiento en 157 unidades médicas, entre ellos hospitales de especialidad, generales e integrales, centros de salud, unidades médicas de especialidades, unidades de apoyo y administrativas, con un monto autorizado de más de 140 millones de pesos.
La búsqueda de la equidad de género ha sido uno de los objetivos más importantes para este gobierno, buscando garantizar el respeto irrestricto a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para el Estado de Sinaloa, también se fortaleció el marco normativo de la Ley para la Igualdad entre Mujeres y Hombres del Estado de Sinaloa, con el propósito de eliminar las brechas de desigualdad en el ámbito laboral. Se ha dado continuidad a la operación de Centros para el Desarrollo de las Mujeres (CDM), ubicados en los municipios de Choix, El Fuerte, Ahome, Guasave, Navolato, Mazatlán, Concordia, Rosario y Escuinapa, beneficiando a 7032 participantes, siendo 6352 mujeres y 680 hombres.
Solo hay en este texto gruesas pinceladas del trabajo realizado en estos dos años en materia de infraestructura social, educación, salud, atención a grupos vulnerables, equidad de género, entre otros. Fiel a los principios de la Cuarta Transformación no solo se ha beneficiado a los pobres, sino que en una visión integral el Gobierno del Estado ha atendido en forma general a la sociedad desde una variedad de frentes, para asegurar que las personas lleven una vida plena con respeto a todos sus derechos.
En Sinaloa la política del bienestar social es una realidad. Es hora de empezar a evaluarla.