Mazatlán contará con policías ecológicos para detener a quienes ensucien las playas. Sin embargo, apenas se activará y ya hay de que agentes que realizan rondines en la zona de playa cobran cuotas a los bañistas para darles más tiempo en esas zonas.
Será verdad, será mentira, pero el caso ya llegó al secretario de Seguridad Pública Municipal, quien de tajó rechazó las acusaciones y dijo que era injusto manchar a la corporación en las redes sociales. Pero no es así, no se mancha a la institución, pues recordemos los casos en que agentes especiales implementaron operativos con abuso de autoridad semanas atrás, solitos se exhibieron, nadie los difamó.
Las autoridades se empeñan a dar una cara que jamás ha existido, pero que la gente cansada de tantos abusos reventó e hizo públicas las tropelías de los policías de Mazatlán. ¿Así operan? ¿Tienen manual de reglas de combate? Sí, pero no los llevan a cabo, prefieren imponer su voluntad a golpes o extorsionando que ayudar a la población.
En ese contexto, la Policía Municipal. En especial este nuevo cuerpo, tiene la tarea de dignificar a la SSPM, pues de lo contrario, al primer video en redes que circule donde se vea a los uniformados cobrar piso por estar más allá del horario permitido, como avalancha sin control vendrá la condena social.
Por más políticas públicas que haya de nuevas policías, los vicios persisten y no se pueden eliminar. ¿Qué hace falta? Sencillo, mejorar sus condiciones laborales para que no se arrojen a las malas prácticas, y eso empieza por salarios decorosos.