Culiacán, Sin.- La Casa del Marino es un monumento emblemático en Mazatlán que duró muchos años en abandono, hasta que fue remodelado e inaugurado como museo y centro de desarrollo cultural.
Esta reapertura fue un trabajo de 35 años por el Patronato Pro Rescate, aunado al apoyo del Gobierno Federal a través de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano;y el Programa de Mejoramiento Urbano.
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Fue el 15 de octubre cuando las autoridades del Instituto Municipal de Cultura, Turismo y Arte de Mazatlán se reunieron con el Patronato Pro Rescate de la Casa del Marino para proponer proyectos que resuelvan las necesidades del inmueble, con apoyos de recursos municipales, donativos de empresarios y sociedad civil.
Sobre la mesa
Al reunirse en la sala de juntas del instituto cultural, los participantes acordaron integrar un consejo consultivo y operativo; capacitar personal; además de crear un presupuesto para llevar a cabo los proyectos del nuevo museo marítimo.
Entre las necesidades pendientes se encuentran la instalación de fotoceldas, un montacargas o elevador, y hacer adecuaciones que cumplan con las normas básicas de accesibilidad.
También se planea restaurar el cañón original, colocar la placa inicial y exhibir objetos de gran valor histórico y artístico en la museografía del edificio.
Según lo acordado en la junta, tanto la operación como los recursos enfocados a dicho centro cultural de Mazatlán deben canalizarse por medio de la institución de cultura municipal, para cumplir con la normatividad.
La Casa del Marino es el único Museo Marítimo en México que depende del Gobierno Municipal, destacando por su rica historia marítima, que incluye la defensa contra la invasión francesa a bordo de la Cordelliere; la operación de flota atunera como camaronera más grande de América Latina; y por tener activa la Escuela Náutica más antigua de esta región.