De casa o visitante, ellos siempre están, la Hermandad Morada se ha convertido en el grupo de animación más importante de los Cañoneros a lo largo de tres años de existencia, del cual han convertido la portería norte del Encanto, un verdadero carnaval.
Comenzando con 50 integrantes, pero cada uno de ellos comprometidos en apoyar el equipo, hoy el grupo ha crecido al doble, y puede presumir, que son de los pocos que reciben, con un cálido abrazo, a aficionados del equipo visitante.
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Los de la Hermandad han logrado que sea una de las barras donde la familia es primero, dejando a un lado la violencia que otros grupos de animación puedan lograr a hacer por el fanatismo al deporte de 11 vs 11.
“En realidad nosotros ocupamos un área pequeña en el estadio, pero en unos años esos cimientos que estamos dejando, va a ir creciendo, ya que hay muchas más personas que traen puesta la playera morada del Mazatlán FC y seremos mayoría, ellos serán aficionados de cuna, nosotros somos de convicción”, explicó Charles Guerrero, que es uno de los líderes dentro del grupo.
La fiesta también la hacen afuera del estadio
Una de las cosas que le caracteriza a este grupo de animación, es la fiesta que se hace después de cada encuentro, en seguida del estadio, en el estacionamiento debajo de un árbol, vuelven a vibrar con sus cánticos y sentimiento al Mazatlán FC.
Además de que es este grupo, quienes llevan la murga futbolera al estadio, haciendo sonar sus bombos, trompetas y gargantas durante los 90 minutos, además de darle ese colorido al estadio, que le da esa pertenencia al equipo.
