Luego del amargo empate ante Necaxa, que tiene sabor a eliminación, el Mazatlán FC sabe que su última llamada será ante Santos Laguna y el no ganar en la fecha 17, estaría diciendo adiós al torneo, quedándose sin jugar el repechaje.
Gabriel Caballero, técnico de los Cañoneros, supo que el partido estuvo en sus manos y que el encuentro no fue del todo malo para los porteños, pese a las ausencias de Nicolás Vikonis, Benedetti y el mismo Eduard Bello.
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“El equipo merece más de lo tenemos, pero no dejamos de luchar, tener esperanza e ilusión. Nos queda un partido e iremos a luchar como sabemos. El equipo luchó y siempre intentó ganarlo, y ahora nos toca ver el juego y analizarlos con calma”.
“Ahora nos vamos con la tristeza del empate y poder haber ganado, pero con la tranquilidad de que dejamos todo en la cancha, no tengo duda”, apuntó el estratega, que sabe que aún está en sus manos la clasificación y que otro empate en la Comarca, sería poner el último clavo en su ataúd.
Caballero está consciente de lo que no se ha hecho en el terreno de juego.
Mazatlán, se ha caracterizado al menos este torneo, el no saber manejar las ventajas, ya que muchos de los puntos que han dejado escapar que ahora lo están mermando en la tabla general, donde depende de un hilo.
“Sabemos que tenemos que hacer lo nuestro y después ver que pasa, sabemos que hemos dejado ir resultados, como el del otro día en casa ante Toluca, hay partidos en donde generamos opciones y es lamentable que no puedan entrar”.
"Tenemos que pasar a lo que sigue y corregir errores que siempre hay. Vamos a ir con la postura y misión de ganar los tres puntos. Hoy tendríamos que tener arriba de 20 puntos”, dijo Caballero.
Sobre su futuro, el estratega mejor no quiso hablar, ya que esperará una evaluación por parte del equipo al final del torneo, y será la directiva quien decida si mantiene el proyecto, del cual tiene al frente torneo y medio o si se va, cumpliendo una constante con el Mazatlán, de cambiar de entrenador cada ocho o nueve meses.