Culiacán, Sin.- Aunque de antemano sabían de las pérdidas económicas que se tendrían en cada plaza a consecuencia de la pandemia por el Covid-19, la Liga Mexicana del Pacífico se preparó con todos los protocolos de sanidad para reactivar la economía, sin embargo nunca imaginaron en ponerse en este receso histórico.
Ante los crecientes niveles de contagio que se empezaron a detectar desde hace ocho días, con el equipo de los Sultanes de Monterrey, que registró alrededor de 16, luego los Yaquis, Cañeros, Charros, Guasave y Tomateros que tiene alrededor de 5 asintomáticos, se vieron obligados a realizar una reunión extraordinaria para tomar esta decisión.
Es así que por primera vez en la historia de los 75 años de estas ligas de invierno, se vieron en la necesidad de ponerse en receso durante 11 días, es decir volverán a reactivarse el próximo 17 de noviembre con las series originales programadas para esa fecha, con el fin de que todos los equipos arrojen en sus pruebas que son negativos.
Definitivamente por lo corto del calendario, estas series quedan canceladas dejando el récord de ganados y perdidos sin ninguna afectación.
En cada reunión se analizaba esta situación, hasta que tomaron la decisión de echar a rodar la temporada, pensando solamente en reactivar la economía, pues los jugadores ya habían perdido toda la temporada al suspenderse el beisbol de verano y era necesario activarlos, al igual que a los empleados de los estadios, los vigilantes, el comercio, tomando todas las medidas de sanidad.
Liga Mexicana del Pacífico y los dueños de los equipos estaban conscientes de que todo esto se tenía que reactivar, porque la sociedad tiene que volver a caminar y ellos se vieron como uno de los principales impulsores, ante esta nueva normalidad.
Desde luego que los negocios de alimento en los estadios se verán seriamente afectados, como a los empleados, porque es poco más de una semana en la que no verán el peso extra que perciben en cada partido.
Esta pausa servirá para reforzar las medidas, intensificando la realización de pruebas a todos los jugadores, miembros del cuerpo técnico y colaboradores de los clubes que tienen contacto con ellos, periodo que permitirá a los afectados actuales su debida recuperación hasta que puedan presentar sus pruebas PCR negativas que les permitan regresar al terreno de juego.
La primera vuelta finaliza el 21 de noviembre y esta vez tras la pauta para el inicio de la segunda vuelta a celebrarse del 24 al 26 de noviembre, será la que cierre la primera vuelta.
Serán 19 los partidos cancelados en total desde este fin de semana, al agregarle la serie suspendida entre Sultanes y Naranjeros a media semana y el último juego en el Francisco Carranza Limón entre Venados y Algodoneros.
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Estas medidas se hacen por primera ocasión en la historia de la liga, con el único fin de continuar con el formato competitivo que caracteriza a la LMP, conformando una primera vuelta con 29 juegos y una segunda con 30 enfrentamientos.
Pese a todo ello Omar Canizales Soto y los dueños de los diez equipos refrendan el compromiso de seguir adelante con la temporada, sin cruzar por su cabeza en ningún momento su cancelación.
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