A ritmo de Banda y entre lágrimas y orgullosa de ganar la medalla de bronce en los Paralímpicos en París 2024, la mazatleca Rosa María Guerrero está en casa, tras varias semanas fuera al estar en la competencia, siendo apapachada por sus familiares, quienes fueron a recibirla al Aeropuerto Internacional Rafael Buelna.

Guerrero arribó a casa a las 10:30 de la mañana, en un vuelo procedente de la Ciudad de México, portando con mucho corazón la medalla, que consiguió en el lanzamiento de bala F55, imponiendo una marca de 25.81 metros, solo superada por la china Fexia Dong y la colombiana Erica Castaño.

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Para Rosa María, sus sobrinas y su mamá han sido un pilar importante para la carrera de la hoy deportista de 39 años de edad, que cumple como la primera mujer porteña en obtener dos medallas en los Juegos Paralímpicos, tal como lo hizo en Tokio 2020+1, estando ahí presentes en la puerta de salida del aeropuerto, llegando desde muy temprano con lonas y mensajes de apoyo.

“Estoy muy contenta y feliz de regresar a mi tierra, volver a mi país y vamos para adelante por lo que sigue”, dijo la medallista.

En la ceremonia de recibimiento estuvo presente el alcalde Édgar González Zatarain y la directora del Instituto Municipal del Deporte, Fabiola Verde Rosas.

Quiere ir a Los Ángeles 2028

La paralímpica enfatizó en su llegada al puerto, que trabajará muy duro para buscar otra presa en el 2028, “Soy una mujer de fe y estoy catalogada entre las mejores del mundo, entonces vamos a trabajar fuertes para llegar a Los Ángeles 2028”, enfatizó Guerrero Cazares.