Mazatlán, Sin.- Los últimos dos años han sido de altibajos para el sector restaurantero de Mazatlán, ya que, producto de la pandemia, cerró sus puertas el 30% de los negocios del ramo y de ellos, el 15% fue de manera definitiva.

El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados en la localidad, Rodrigo Becerra, señaló que la primera ola de la pandemia por Covid fue demoledora para los 100 negocios agremiados.

"Tuvimos varios meses donde no venimos nada, no teníamos para pagar nómina, rentas incurrimos en muchas deudas y empezamos aprender a cómo llevar la pandemia. Empezamos adaptar nuestros negocios con la venta a domicilio u ordena y recoge", dijo.

Indicó que la segunda y tercera ola de contagios fue muy difícil, pero como ya se tenía un poco de experiencia, las afectaciones fueron menores y en unos meses empezó la recuperación.

Recordó que han sido dos años de altibajos constantes, en donde su sector ha hecho grandes esfuerzos para mantener primero las puertas abiertas y después a toda la planta productiva, con la ventaja de temporadas muy buenas, como lo fue el cierre del año pasado, pero con crisis fuertes como la de este mes de enero, donde a la cuarta ola por Covid19, se sumó un muy alto proceso inflacionario.

"Esto los ha obligado a realizar ajustes en el costo de sus platillos tratando de no afectar al consumidor a fin de mantener el mercado", explicó.

Becerra Rodriguez señaló que esa coordinación, es la que ha perdido que Mazatlán logre el equilibrio que ha tenido en los dos años de la pandemia, entre salud y economía, y en este caso, el realizarlo permitiría no solo a los restauranteros y sus trabajadores, sino a toda la cadena turística, tener una recuperación importante, tras las dificultades de las últimas semanas.

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