Culiacán, Sin.- A pesar de las recientes lluvias que han caído en el estado, las presas de Sinaloa aún no han alcanzado el nivel de almacenamiento necesario para satisfacer las demandas de agua para riego agrícola y consumo humano. Esto de acuerdo a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), advirtiendo sobre la persistencia de condiciones de sequía en diversas regiones.
Según datos proporcionados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las principales presas del estado, incluyendo las presas Eustaquio Buelna, Sanalona, y Adolfo López Mateos, registran niveles significativamente bajos. Este déficit pone en riesgo no solo las actividades agrícolas, sino también el suministro de agua para la población en general.
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El estado de almacenamiento de las presas se encuentra de la siguiente manera:
El almacenamiento total de las presas está en un 2743.9 millones de metros cúbicos, lo cual representa el 17.6 por ciento de su capacidad total.
La presa Huites, en Choix, tiene 30.4 por ciento de nivel de agua, y la Guillermo Blake, de Sinaloa municipio, con 24.4 por ciento. Así también, la Gustavo Díaz Ordaz, de Sinaloa, se mantiene en el 27.0 por ciento.
La presa Miguel Hidalgo, en El Fuerte, presenta niveles de agua del 6.0 por ciento, mientras que la Josefa Ortiz de Domínguez, registra un 7.0 por ciento.
La presa Eustaquio Buelna, de Salvador Alvarado, presenta un porcentaje de almacenaje de agua del 5.4 por ciento.
En Badiraguato, la presa Adolfo López Mateos se mantiene en el 10.6 por ciento y la presa Sanalona en Culiacán, se encuentra con el 19.1 por ciento de nivel de agua.
Para el sur de Sinaloa, la presa José López Portillo, en Cosalá, tiene niveles de agua del 15.6 por ciento y la Aurelio Benassini en Elota tiene 34.7 por ciento.
Aunque las lluvias recientes han traído algo de alivio, las presas de Sinaloa siguen enfrentando un desafío significativo en cuanto a su capacidad de almacenamiento. La situación requiere una respuesta coordinada y esfuerzos continuos por parte de las autoridades y la comunidad para asegurar la disponibilidad de agua en el futuro cercano.