Mazatlán, Sin.- La violencia en Mazatlán ha comenzado a generar efectos profundos en la salud mental de sus habitantes, quienes ahora enfrentan psicosis, ansiedad y estrés postraumático.
Así lo informó Luis Ángel Salinas Gudiño, presidente de la Asociación Ayudemos a los Jóvenes y miembro del Colegio de Psiquiatras de Mazatlán A.C., al detallar el impacto de los recientes hechos violentos en la población.
También puedes leer: ‘Había niños llorando y adultos en shock’, relatan empleados de centro comercial
“Los hechos violentos que hemos estado viviendo en el municipio en los pasados días afectan la salud mental de cualquier ciudadano, sin importar su edad. Se ha incrementado el miedo, la ansiedad, e incluso algunos ya presentan síntomas de estrés postraumático”, explicó Salinas Gudiño.
El especialista también advirtió sobre la "infoxicación" o exposición continua y sin filtros a noticias violentas en redes sociales y aplicaciones de mensajería.
La repetición constante de videos, imágenes y mensajes, sin un control adecuado, intensifica los síntomas.
“La mayoría de los ciudadanos están en grupos de WhatsApp, de redes sociales, donde segundo a segundo está llegando información muy explícita de los eventos de violencia, como balaceras, robos, asesinatos y secuestros", comentó Salinas Gudiño.
El impacto de esta sobreexposición afecta también a los niños y jóvenes, quienes en muchos casos no poseen la madurez necesaria para procesar este tipo de información. Según el psiquiatra, padres de familia han reportado a la asociación que sus hijos pequeños comienzan a sufrir de pesadillas y dificultades para dormir.
“Muchos niños de primaria y preescolar están teniendo dificultades con el sueño y presentan pesadillas. Incluso el adulto empieza a mostrar cierto tipo de psicosis debido a esta constante exposición", señaló.
Además, Salinas Gudiño sugirió que los adultos deben asumir la responsabilidad de filtrar la información que reciben y limitar su difusión, especialmente en presencia de niños.
“Como padres de familia, tenemos que tener mucho cuidado con los temas que tocamos frente a nuestros hijos, ya sean adolescentes o niños, porque no tienen la edad para comprender o asimilar estas situaciones", afirmó.
Para mitigar esta problemática, el especialista recomendó que cada persona busque lo que le brinde paz y bienestar.
“Si un padre de familia siente que llevar a su hijo a la escuela puede aumentar su intranquilidad, no debería obligarlo. Las decisiones que nos proporcionen paz son las mejores en este momento", concluyó Salinas Gudiño.