Los cambios de uso de suelo en terrenos forestales para del desarrollo inmobiliario en Mazatlán estan dejando sin hábitat a numerosas especies de fauna silvestre.
Los casos más mencionados son los venados cola blanca, animal representativo de Mazatlán a quién le debe precisamente su nombre.
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El año pasado, ciudadanos denunciaron el avistamiento de una familia de venados que quedaron atrapados en un predio colindante a la recién construida avenida Delfín, al norte de la ciudad.
Este lunes, Son Playas, medio de comunicación local, volvió a reportar el avistamiento de varios ejemplares de esta especie en un predio donde ya se están realizando trabajos de remoción de la vegetación.
Sin reubicación
Al respecto, el director de Desarrollo Urbano Sustentable, Paul Maldonado Galindo, señaló que el Reglamento de Construcción Munición no considera la reubicación de la fauna silvestre a la hora de otorgar una licencia de construcción.
Mientras que la directora de Ecología y Medio Ambiente, Eunice Murua Figueroa, indicó que no es facultad de esta dependencia vigilar y asegurar la reubicación de dichos animales sino de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente, ya que quien autoriza los cambios de uso de suelo son la Comisión Nacional Forestal y la Secretaría de Marina y Medio Ambiente.
"Cuando es un cambio de uso de suelo lo hace a través de la Comisión Nacional Forestal, se reúne todo un consejo a nivel estado, se va a hacer con el cambio de uso de suelo, de ahí, una vez que se otorga el uso de suelo, cienen los términos y las condicionantes, todo lo que debe de hacer y una de ellas es la reubicación de las flora y de la fauna existente en el lugar", explicó.
Agregó que el desarrollado, antes de cortar cualquier árbol o remover la vegetación, debe ahuyentar a la fauna y eso lo debe regular Profepa.
Reconoció que el año pasado, cuando se dio el primer avistamiento, un grupo de ciudadanos se sacaron preocupados por qué no se estaba ahuyentando la fauna como debía ser y aunque no era su facultad la dependencia ayudó ofreciendo vehículos, gasolina e inspectores con un permiso transitorio que les otorgó la dependencias federal para tratar de capturar y reubicar a los venados.
"Reubicar a un venado es la cosa más difícil del mundo, tiene que ser con dardo y cada dardo cuesta miles de pesos, es estarlo venadeando, lo tienes que dormir trasladar y rehabilitar y soltar en otro espacio", agregó.
Finalmente esto no se logró, además de la falta del recurso económico, en el municipio hay un solo veterinario que es especialista en manejo de vida silvestre.
Asimismo, precisó que quién debería realizar esta actividad y pagar por ello es el dueño del predio.
Levantan monumento
Mientras que los venados se quedan sin hábitat, en la glorieta de las avenidas Carlos Canseco y Atlántico se instaló una figura monumental de un venado donado por un empresario local.
Precisamente, en un predio colindante a esta glorieta, es donde se han observado en dos ocasiones (en junio y diciembre del 2023) a una familiar de venados cola blanca que han quedado atrapados ante la urbanización.
