Mazatlán, Sin.- A modo de protesta e inconformidad, ambientalistas, ciudadanos y colectivos mazatlecos "crucificaron" el ecocidio que representa la tirolesa que ya se construye para unir a los cerros del Crestón y del Vigía.
Al grito de “¡El Faro no se vende, el Faro se defiende!”, “¡El Faro Mazatlán no es de Amado Guzmán!”, de nueva cuenta salieron a las calles, ahora tomaron el Paseo del Centenario y el Observatorio 1873, propiedad del empresario Amado Guzmán Reynaud, promovente del proyecto de la tirolesa, a quien acusan de ser un depredador de la naturaleza.
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En la entrada principal de este complejo turístico, ubicado en el cerro del Vigía, colocaron una cruz de madera, hicieron pintas y lanzaron consignas.
“No tiene por qué ser destruido el cerro, el Crestón es turismo de paisaje, de observación, no para hacer negocios, ¿saben en cuánto le está rentando el cerro del Crestón a un rico de aquí de Mazatlán? en 7 mil pesos mensuales, menos de una renta de cualquier departamento, negocio redondo para el señor", expresó el activista Gildardo Izaguirre.
Mario Astorga, del Consejo Ecológico de Mazatlán, mencionó que es un proyecto que no tiene facilidad, ya que en el Manifiesto de Impacto Ambiental hubo omisiones en cuanto a la flora y fauna que ahí habita.
"Es un proyecto que no tiene factibilidad, una Manifestación de Impacto Ambiental con grandes mentiras y que ocasionarían un accidente en las personas que pudieran utilizarlo, hay grandes omisiones en cuanto a flora y fauna, pero los señores se han mantenido con ese capricho, la MIA dice que no hay flora y que no hay fauna, es una gran mentira", dijo.
Próxima manifestación
Sin precisar fecha concreta, se anunció que la próxima manifestación va a ser en las oficinas de la delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, dependencia federal que aprobó el Manifiesto de Impacto Ambiental.
La próxima manifestación va ser en contra de la Semarnat, es la parte fundamental del problema, autorizó un estudio de impacto ambiental plagado de omisiones, sobre todo, lo más importante, es de que afirma que no hay especies en riesgo de extinción, apuntó Izaguirre.
Añadió además que ya se prepara un amparo en contra de la dependencia federal con el que busca "tumbar" la MIA aprobada, y con ello detener la construcción de la tirolesa al omitir información o declarar información falsa.