Culiacán, Sin.- Tras la situación actual que se vive por la sequía y el mal uso que se le da al agua, la directora de Conselva, Sandra Guido, planteó cuatro puntos importantes para crear una agenda hídrica integral por el vital líquido.

Entre las propuestas, destacan el proteger y restaurar las zonas de provisión de agua a otros servicios ambientales, manejo eficiente del agua en actividades agropecuarias, administración eficiente y sustentable del agua en la ciudad y mecanismo financieros que involucran a usuarios y gobierno.

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La especialista en el cuidado hídrico mencionó que hoy en día se vive un problema de sequía que desde hace 16 años se advertía que azotaría en el estado, al trabajarse un monitoreo de cuencas desde el Río Piaxtla, en San Ignacio, hasta Escuinapa. Sin embargo, la gente sigue gastando agua como si no hubiera estiaje.

Asimismo, mencionó que, de acuerdo con un informe del Banco de México en el 2022, la severidad de la sequía se está incrementando, además que no se recuperan al mismo ritmo los recursos hídricos y cada vez es sequía de mayor duración e intensidad.

"Cada vez vamos a tener menos lluvia y el agua de las presas se evapora por las altas temperaturas. Las cifras oficiales señalan que en Sinaloa vamos a tener 5 grados más de temperaturas promedio", indicó.

En ese sentido, explicó que una elaboración propia con datos del Monitor de Sequía en México del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) muestra que la tendencia de lluvia de 2021 a 2023 va a la baja, con 952.9 milímetros de agua de lluvia hace tres años a 733.6 milímetros el año pasado.

Un reporte del pasado 15 de abril del SMN refleja que Sinaloa es de las 10 entidades del país con el 100 por ciento de su territorio en sequía, al igual que, Aguascalientes, Chihuahua, Ciudad de México, Guanajuato, Hidalgo, Estado de México, Morelos, Querétaro y Tabasco.

Sandra Guido comparó esa misma fecha, pero del 2015, reflejó que el centro del estado estaba anormalmente seco y en el resto de la entidad no había sequía, y ahora tenemos sequía extrema o excepcional.

“Si llueve, si se llenan las presas, pero no tanto como hace 20 años, lo que sí estamos haciendo es gastando lo mismo como si no hubiera sequía", explicó.

Finalmente, recomendó qué es importante identificar y proteger con estudios técnicos los sitios donde se está produciendo más agua, especialmente las sub cuencas que rodean las presas.