Mazatlán, Sin.- Estar en contacto con las aguas negras, residuales o drenaje, que desborda de alcantarillas y registros, es muy riesgoso para la salud, ya que la vía de transmisión de muchos virus, bacterias y parásitos, es fecal-oral.

La doctora Jacqueline Valerio Ramos, coordinadora de médicos de la Cruz Roja, aseguró que una taza de baño está diseñada para lograr el mínimo esparcimiento de estos microorganismos al aire o a la superficie, aún así el inodoro se considera como un objeto con alto riesgo de contaminación, al igual que los utensilios con los que se le hace la limpieza en él.

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El riesgo de contaminación aumenta cuando las aguas residuales están completamente expuestas, como sucede cuando hay una fuga en la vía pública, además de que al sistema de drenaje van a dar todo tipo de sustancias y residuos, no solo los fecales.

"Ahora sí estamos expuestos a las aguas negras, que prácticamente no solamente es lo de uso familiar, sino de uso de toda la población, más de una persona va a estar infectada por parásitos, por bacterias, por virus, así que prácticamente se hace un cóctel de microorganismos", indicó.

"Si a esto le sumamos que las aguas negras quedan expuestas al sol y al irse secando hace se crean vapores, en estos vapores algunos de esos microorganismos van a sobrevivir y van a empezar a esparcirse por el medio ambiente y va a quedar impregnada toda la zona de alrededor, aparte de las salpicaduras que se mete a tu casa, todo lo que el drenaje toca tiene un alto riesgo de contaminación", agregó.

Los olores, añadió, no son más qué partículas pequeñísimas de fluidos, sustancias, que aunque no se pueden ver o tocar, siguen siendo peligrosas al entrar en contacto con el organismo.

Consecuencias

El estar en constante exposición a las aguas negras puede detonar implicaciones graves para la salud, como brotes de infecciones gastrointestinales en su mayoría.

Recomendaciones

Valerio Ramos recomendó estar en contacto lo menos posible con los residuos y si estos fluyen por la vía pública a consecuencia de una fuga, lo ideal es que las puertas o las ventanas que estén hacia la calle permanezcan cerradas. Así se evitará el ingreso de las pequeñas partículas que vuelan en el aire o las que las salpicaduras.

Para desinfectar áreas o superficies contaminadas, no hay nada como el cloro, aunque también advirtió que tener mucho contacto con este producto puede causar daños en los tejidos de la piel, así que su uso debe ser moderado.

Para saber

La Organización Mundial de la Salud señala que el agua contaminada y el saneamiento deficiente están relacionados con la transmisión de enfermedades como el cólera, otras diarreas, la disentería, la hepatitis A, la fiebre tifoidea y la poliomielitis.

Estudios realizados por la Universidad Nacional Autónoma de México indican que entre las bacterias que causan enfermedades están la b, causante de la fiebre tifoidea; la shigella, bacteria que produce una enfermedad intestinal, disenteria, que es una inflamación del intestino que muchas veces produce diarrea con sangre o pus; legionella, que ocasiona una infección pulmonar que en los casos más graves causa neumonía.

Entre los virus: Hepatitis A, llega el agua por contaminación fecal; y el rotavirus, potencialmente transmitido por agua contaminada, es la causa del común de diarrea en niños pequeños.

Entre los protozarios (parásitos) destaca el giardia lambia, de las parasitosis más comunes en México, se propaga por la contaminación de alimentos o agua, produce enfermedad intestinal que tiene como síntomas diarrea, malestar y fatiga.

También el cryptosporidium parvum, causante de diarrea, afecta más severamente a niños ancianos y pacientes inmunosuprimidos.