Mazatlán, Sin.- El problema de los desarrollos verticales en este destino turístico no son los servicios públicos ni la infraestructura urbana, sino la movilidad, aseguró el presidente del Colegio de Arquitectos de Mazatlán, Gerónimo Salas Lizárraga.
“En la ciudad de Mazatlán, en los últimos años hemos crecido como nunca, hemos tenido muchos problemas de movilidad, cuyo tema ya se está trabajando en todos los colegios de la ciudad, más que nada al momento de hacer esas construcciones verticales vienen muchas veces los problemas de movilidad por el cual pasa la ciudad”, expresó.
Dijo que este asunto ya se trató con las autoridades municipales de Planeación y Jumapam, y que hay voluntad política para emprender medidas y resolverlo.
Los problemas de movilidad tienen que ver con el movimiento y el tiempo de desplazamiento de las personas y los bienes en una ciudad, que se complica con los congestionamientos viales, la saturación del transporte, la falta de estacionamientos, hechos de tránsito, inseguridad, entre otros.
Ya están al tanto el gobierno y existe voluntad política, así como como de los colegios y asociaciones del municipio para trabajar en ello.
Salas Lizárraga
Con respecto a la infraestructura urbana y de servicios, refirió que hasta hace dos meses, otro problema que se tenía en el puerto era el de la insuficiencia de agua, ante la demanda que requería el crecimiento urbano vertical; sin embargo, con la apertura de la planta potabilizadora Miravalles, este asunto dejó de ser una dificultad.
Incluso, comentó que de acuerdo a información proporcionada por el gerente de Jumapam, Luis Gerardo Núñez Gutiérrez, la planta Miravalles garantiza el abasto de agua de aquí a 20 años.
“Sí es una opción la construcción vertical para Mazatlán, es lo que viene en todas las ciudades del país e internacionalmente, así se está tratando, las ciudades están creciendo verticalmente”, indicó.
Salas Lizárraga agregó que el jueves pasado se realizó un taller con directores responsables de obras, donde se trataron precisamente los temas relacionados con el desarrollo urbano vertical, entre ellos el problema de movilidad que ocasiona este tipo de edificaciones y el de infraestructura urbana y de servicios.
Fue ahí donde el gerente de Jumapam aseguró que todos los servicios públicos están completamente cubiertos al momento de dar un permiso de construcción, ya que lo primero que se pide es un estudio de factibilidad.
Y con la operación de la planta potabilizadora Miravalles, el recurso de agua se garantiza en 20 años.
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