Culiacán, Sin.- “Rigoletto” es una ópera de libreto italiano que cuenta la historia de un padre que lucha por proteger a su hija Gilda de las garras seductoras del mujeriego Duque de Mantua.
Giuseppe Verdi fue el compositor y creador de esta obra maestra que se presentó por primera vez en Mazatlán, con doble función en el Teatro Ángela Peralta el viernes 11 y sábado 12 de octubre, como cierre de la Temporada de Ópera Mazatlán 2024.
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Esta adaptación de “Rigoletto” presentó una producción moderna con elementos mínimos de utilería, vestuario actual, escenografía sencilla, enfocándose en la esencia emocional y musical de la obra de Verdi.
La ópera expone una aristocracia corrupta y el sufrimiento de las clases bajas; subraya la venganza, la traición, el destino, el sacrificio personal, el amor filial; sobre todo, el poder seductor de su música, a través de arias icónicas como “La Donna E´ Mobile”.
Una trama dramática, música intensa y apasionada, más el talento vocal del barítono mazatleco José Adán Pérez; tenor Edgar Villalva; y la soprano de Guadalajara, Anabel de la Mora, cautivaron a la audiencia del teatro porteño.
Cuando Anabel de la Mora encarnó a Gilda, llevó las emociones del público al limite logrando transmitir el sentimiento de lo que provoca el primer amor; mientras Edgar Villalva, en los zapatos del mujeriego Duque de Mantua, demostró un talento formidable ante la complejidad de la construcción melódica de Verdi.
La voz del protagonista, José Adán Pérez, ha conquistado los escenarios más exclusivos de Japón, Suiza y Estados Unidos, enorgulleciendo quienes habitan su natal Mazatlán orgullo por su éxito en el ámbito operístico.
El mazateco ha compartido escenario con el famoso cantante Plácido Domingo; y el director de orquesta, Gustavo Dudamel; entre otras grandes figuras de la escena internacional.
Verdi compuso la música en 1851; ahorac la Camerata Mazatlán y músicos invitados bajo la batuta del maestro Sergio Freeman se encargaron de revivirla, logrando combinando pasión, emoción, complejidad y riqueza musical, a fin de crear un ambiente dramático y envolvente.
Rodrigo Caravantes fue el director de escena, quien logró capturar la tragedia de Rigoletto en el intento de evitar su destino, al grado de exponer el alto nivel operístico que participó.
Otros miembros del elenco fueron Noel Osuna como el Conde Monterone; Flor Estrada, de Giovanna; Rodolfo Ituarte hizo a Marullo; Alfredo Torres actuó de Matteo Borsa; José Miguel Lora fue el Conde Ceprano; Ángela Rodríguez, encarnó a la Condesa Ceprano; Fernanda Osuna dio vida a Paje; y Fernando Landeros fue Ujier.
La escenografía de esta adaptará uno estuvo a cargo de Félix Arroyo; el diseño de vestuario lo hizo Elisa Espinosa; Agustín Martínez se encargó de la iluminación y coreografía: mientras que Axiel Díaz se enfocó en el maquillaje.