Mazatlán, Sin. Personal que laboraba para el programa Prospera, que desapareció con la actual administración federal, se manifestaron para exigir su reinstalación luego que fueran dados de baja pese a que aseguran ser personal de la Secretaría de Salud del Estado.

Además del regreso a sus fuentes laborales, el personal compuesto la mayoría por enfermeras, hicieron un llamado a la autoridad para el pago de 3 meses que les adeudan tras la desaparición del programa de ayuda.

Dijeron, ha sido difícil la situación económica por la que atraviesan y más si se trata de jefas de familias las afectadas por el recorte.

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Los inconformes realizaron una marcha que inició en el Centro de Salud Urbano y culminó en la Jurisdicción Sanitaria número 6.

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