Mazatlán, Sin.- A pesar de la crisis que existe en el transporte público en todo Sinaloa, por las deudas que enfrentan los permisionarios que adquirieron los camiones Puro Sinaloa, el Gobierno del Estado no meterá las manos, al contrario, les exige a las Alianzas que se creen más rutas para atender la demanda que hay en el pasaje.
“Cometieron un crimen ahí, el haber llevado a los transportistas a un endeudamiento que les ha costado parte de su patrimonio familiar”, aseguró el gobernador Rubén Rocha Moya al respecto.
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Y ante la petición de ayuda que le han hecho las organizaciones transportistas, el mandatario sinaloense dejó en claro que lamentablemente no pueden hacer nada, pero que están muy atentos al problema.
Problemas financieros
El problema con las unidades de los camiones urbanos “Puro Sinaloa” ha llevado a los permisionarios a pasar por serios problemas financieros, que se hicieron de las nuevas unidades con aire acondicionado, pero no contaban con la crisis económica que se vino en todo el mundo con la pandemia del Covid-19.
En todo el estado, ante la petición de que las personas se quedaran en casa, se redujo la circulación de camiones urbanos y con ello se agudizó la crisis.
El titular de la Dirección de Vialidad y Transportes (DVyT) en Sinaloa, Miguel Loaiza Pérez, reconoció que la prolongación de la pandemia por Covid-19 durante más de dos años causó estragos en el sistema de transporte público urbano de pasajeros de las ciudades de Sinaloa, sobre todo en Culiacán, en donde actualmente operan menos de 500 unidades de un total de un mil 089 que integran la flota.
“La disminución de autobuses en circulación fue mayor que ahora en los momentos pico de la pandemia durante 2020 y 2021, cuando la suspensión general de actividades no esenciales y la imposición de restricciones sanitarias severas provocaron una caída de ingresos y que algunos transportistas cayeran en cartera vencida”, señaló.
Pega más a Culiacán
En diciembre del año pasado, José Manuel Mendívil Álvarez, presidente de la Alianza de Concesionarios del Transporte Público, Urbano y Suburbano de Culiacán, informó que regresaron 15 camiones a la financiera Daimiler Financial Services México S.A. de C.V y la empresa Mercedes Benz.
Y adelantó que en total iban a ser 40 las unidades que pertenecen a la renovación del transporte urbano las que iban a devolver a la financiera, por estar enfrentando pérdidas millonarias luego de haber adquirido las unidades y por la pandemia.
Advirtió que de las 44 nuevas unidades, 40 iban a ser devueltas y 4 solamente iban a reestructurar el adeudo; lo mismo ha pasado en Mazatlán y en Los Mochis, por lo que regresaron a la circulación muchos de los camiones viejitos.
En Mazatlán, hacen agua
En Mazatlán, ha sido la empresa Autotransportes Águilas del Pacífico la que resintió más la crisis originada por la pandemia, ya que 9 unidades de las llamadas Puro Sinaloa ya habían regresado a la financiera y estaban a punto de entregar otros 7, de una flotilla de 30 camiones con aire acondicionado.
Juan Zataráin Velarde, presidente de Autotransportes Águilas del Pacífico, dijo que los dos años de la pandemia ocasionaron que los permisionarios no pudieran pagar las nuevas unidades con aire acondicionado.
Puso de ejemplo que desde que inició la pandemia, en el 2020, debían un millón 600 mil pesos por cada camión, y que en la actualidad la cartera vencida de cada unidad va en 2 millones 550 mil pesos, lo que hace a los camiones con aire acondicionado “impagables”.
Además, para los permisionarios de Águilas del Pacífico que reestructuraron los adeudos con la empresa financiera, si los pagos anteriores eran de 40 mil pesos al mes, ahora las letras son de 52 mil pesos por cada unidad.
Caso alianza de camiones
En la Alianza de Camiones Urbanos de Mazatlán, según su dirigente, Faustino Mejía Chávez, el problema con la renovación de las unidades no les ha pegado todavía.
Aseguró que la situación ha estado durísima y no fácil, pero para estos tiempos se necesitaba más unión y compromiso de parte de los permisionarios y eso le ayudó a la Alianza de Camiones de Mazatlán.
Informó que ellos adquirieron más de 150 unidades con aire acondicionado, entre ellos los carros que cubren la ruta Sábalo Centro, como los llamados “Puro Sinaloa”.
“Son 150 vehículos aproximadamente, de todos esos vehículos se han regresado 9 carros, nosotros hemos regresado 9, 5 de ellos se regresaron porque la persona falleció, la financiera no quiso negociar y se regresaron sin problemas. Todos se han ido sin problemas, los otros dos, de Mercedes, se regresaron porque las persona falleció, la mamá falleció y la otra persona ya no pudieron por la situación de la pandemia, se los llevó la pandemia, y los otros dos carros no eran Mercedes, eran International y esos dos carros nunca recibieron el apoyo gubernamental, se tuvieron que regresar, esos son los casos de nosotros, de ahí fuera, ninguno”, explicó Mejía Chávez.
De hecho, indicó, no estuvieron de acuerdo con los dos carros que se regresaron, porque las dos propietarias no quisieron negociar, porque había permisionarios que sí querían seguir con la deuda, y se respeta esa situación.
Agregó que se buscó que no tuvieran mayores problemas y luego de hablar con la financiera, les permitió regresar las unidades en dación total, como pago total y se acabó al problema, pero se fueron al Buró de Crédito.
Con respecto a la cartera por la compra de las unidades con aire acondicionado, explicó que la ventaja de ellos es la Unión que mantienen como permisionarios, donde pasaron la responsabilidad entre todos los socios y apaciguaron el problema.
“¿Qué es lo que tuvimos que hacer para no perder rutas? Tuvimos que subsidiar las rutas e igualarlas y subsidiarlas, es decir, tú trabajas tres días por una ruta buena y te voy a mandar al cuarto día a una ruta mala, pero ese cuarto día lo vas a trabajar subsidiado y te vas a ir con una cantidad, te vas a ir con una cantidad que te vamos a pagar ese día para que tu cumplas con el servicio y la ciudadanía no padezca ese servicio”, detalló Mejía Chávez.
Dijo que tuvieron que reducir el servicio a su mínimo, ya que no iban a tener carros de más cuando no se ocupan y se tuvieron guardados.
El presidente de la Alianza de Camiones, manifestó que tuvieron que hacer frente al problema de la pandemia desde varios frentes y les permitió sobrevivir hasta el momento, en que se están recuperando las rutas.
PARA SABER
- Cada camión “Puro Sinaloa” costó de un millón 800 mil a 2 millones de pesos de contado, pero con la reestructura y la renegociación con la financiera, el costo se fue muy arriba.
- El que no pagó o no pudo pagar por la reducción de rutas por la pandemia, se le reestructuró la deuda para que ese año y medio que no abonó a la financiera, lo pagará en dos años más.