Mazatlán Sin.- Desde las tradicionales de picos, hasta las de personajes que están de moda, cualquier piñata puede tomar vida en las manos de María del Socorro Rendón Lizárraga.

Ella aprendió este oficio gracias a su esposo, Manuel Díaz de La Cruz, hace 44 años, y al momento de fallecer su compañero de vida, en el año de 1994, se quedó al frente del negocio familiar. Con la experiencia adquirida y la pasión por elaborar piñatas, su vida ha estado llena de formas, colores y figuras que han alegrado a miles de mazatlecos.

Desde 1975 se ha dedicado a hacer piñatas, un trabajo en el que se mezcla la creatividad y la paciencia, y que dan como resultado figuras que gustan a chicos y grandes. Eso no se paga con nada, y más al tratarse de un artículo que alegra y ayuda a convivir entre amigos y familiares sanamente.

Al principio se le complicaba elaborar una piñata, pero ahora puede terminar una en menos de dos horas, forrar cartón con papel periódico, engrudo y posteriormente vestirla con papel de china.

Recuerda que ella y su esposo empezaron a hacer las piñatas para venderlas a las dulcerías y luego pusieron el negocio con el que sacaron adelante a sus hijos. Ahí sigue ella, desempeñando con orgullo este noble oficio.

LA ELABORACIÓN

En Las Mil Piñatas, su negocio ubicado por la calle Guillermo Nelson, en el Centro de la ciudad, trabaja contra reloj junto a sus dos hijos para mantener viva esta tradición, y sobre todo llevar alegría y color a las familias mazatlecas esta temporada navideña.

Cartón, un recipiente con engrudo, papel de china, crepé y rotafolio, son sus herramientas de trabajo, pero sobre todo noticias viejas. Doña Mary sabe que sin periódico no hay piñatas. Por eso, quizás estas letras sirvan para envolver el cuerpo de la próxima piñata que le pida un cliente.

A un mes de que cumpla 65 años de edad, da vida a cualquier diseño que le pidan los clientes con precios que van desde los 35 (las mini), hasta 120, 150,180, 300 y 350 pesos, dependiendo del tamaño y la figura.

Recuerda que años atrás llegaban los clientes con dibujos, fotografías o periódicos con el diseño de la piñata, todavía guarda dos cajas llenas con esas peticiones, ahora con la tecnología, ya traen la idea en el celular.

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En Navidad, el diseño más buscado es la estrella de siete picos, mientras que el resto del año las peticiones de sus clientes son de diferentes personajes, desde el Hombre Araña, Gokú, Capitán América, la Mujer Maravilla, números, las princesas, hasta Transformers, que es la figura más difícil de crear.

Empezamos con piñatas de Cepillín, Mafafa, casitas, canastitas, Dora la exploradora, Hello Kitty, pero todo va cambiando y en diciembre las figuras que más buscan es la tradicional estrella, botas, Santa Claus, monos de nieve y a los niños les llevan de otro tipo de figuras, por eso tenemos surtido para los grandes y chicos, que buscan divertirse y disfrutar las posadas y Navidad

Doña Mary

Por eso, explica que en estos meses cierra los pedidos de personajes y se dedica a elaborar puras figuras alusivas a la Navidad, porque se hacen en serie hasta de diez, se recorta, se pega y se arma rápido, mientras que en las especiales se dura hasta una semana en una sola pieza.

TIEMPOS DIFÍCILES

La venta empieza a repuntar a finales de noviembre, con el inicio de las preposadas en los trabajos y escuelas. Luego vienen los festejos en las colonias, hasta el Año Nuevo.

Reconoce que los tiempos han cambiado, pues se vende poco y hay mucha competencia.En la actualidad, para la temporada navideña, ella y sus hijos elaboran un poco más de 150 piñatas, que es nada comparado con las mil 500 o dos mil que hacían hace 15 años.

Antes sí tenía personal, pero la mayoría de ellos están haciendo piñatas en sus casas, incluso te quitan hasta los clientes, porque las dan más baratas y no pagan impuesto, ellos sacan el costo y lo que les quede de ganancia es bueno, pero el Sol sale para todos, Dios nos bendice

Doña Mary

La mujer originaria del municipio de Concordia destaca que ha podido sobrevivir debido a que tiene clientes de todo Mazatlán, desde hace muchos años. Sus hijas ahora vienen a comprar piñatas para sus nietos y bisnietos.

‘GUERRA’ DE PIÑATAS

Desde hace varios meses, personajes como Buzz Lightyear, El Hombre Araña, las princesas, Batman, entre otros, están “metidos en líos” en México. Sus imágenes se cuentan entre las favoritas para fabricar piñatas, objetos artesanales elaborados con papel de colores que se usan con frecuencia en las fiestas infantiles.

Pero ahora los piñateros enfrentan a las autoridades que han confiscado toneladas de mercancía por violar derechos de propiedad intelectual en diferentes estados del país, aunque muchos artesanos no están de acuerdo, pues dicen que las piñatas no son reproducciones exactas, sino una caricatura de los personajes, por lo que no puede decirse que plagian las imágenes.

Doña Mary confirmó que hace unos meses se mantenían con las puertas cerradas en el negocio, porque personal de la Fiscalía General de la República realizó decomiso de piñatas de figuras de Disney y Marvel.

Afortunadamente para acá no vinieron, yo le pedí mucho a Dios que nos protegiera, pues de esto me mantengo y es un problema porque los niños quieren piñatas de personajes, yo tengo más de 40 años en el negocio y nunca había visto eso, que se las llevaran o te piden dinero por dejarte vender

Doña Mary

Fiel a la tradición, en recuerdo a su esposo y con la esperanza de tener una buena venta que le ayude a sacar los gastos de su hogar, ella sigue en la elaboración. Entre el papel de china y el engrudo, espera que una de sus piñatas esté en cada hogar mazatleco esta temporada navideña.

DESDE CHINA

La piñata es de origen chino, luego pasó a España y de ahí a México, país que la adoptó y transformó en una tradición.

HISTORIA CRISTIANA

El nacimiento de las piñatas en México está vinculado con la historia cristiana y su expansión evangelizadora. Los religiosos adoptaron esta usanza para que los pueblos originarios de México se familiarizaran con el concepto del pecado, y así nació la estrella que cada Navidad se rompe, simbolizando los 7 pecados capitales (soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza) a los que se debe renunciar.

DATO

44 años lleva María del Socorro en la elaboración de piñatas.

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