Mazatlán, Sin.- Para la próxima temporada de sequía en Mazatlán se tiene asegurado el abasto de agua en el municipio.
El gerente general de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Mazatlán, Jorge Guadalupe González Naranjo, explicó que se tiene una buena reserva del líquido en las presas y que la paramunicipal se prepara dando mantenimiento a la infraestructura hídrica.
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Reconoció que hasta el momento tienen buen balance debido a que la temporada de lluvia pasada fue buena, luego de dos períodos de sequía fuerte, sin embargo, la recomendación a los usuarios es a no confiarse, a cuidar el agua y también prevenirse en casa, contando con tinacos, piletas, aljibes o cisternas para tener asegurado el consumo doméstico.
“Sabemos que viene la temporada de verano, que aunque tengamos la presa (Picachos), no nada más es para consumo de la ciudad; hay que recordar que también está el tema de los agricultores, que una buena parte se va para allá”, agregó.
Con respecto a los agricultores, dijo que ya se les anunció por parte de las autoridades correspondientes que tendrán un buen ciclo, lo que les da un buen indicador de que hay suficiente agua.
Para prevenir el despilfarro del agua se toman acciones en el tema de la concientización de la sociedad, para que conozca la problemática que podría enfrentarse en los años que vienen debido a que cada vez más se va a sentir la sequía.
Para saber
En el 2022 en Sinaloa se vivieron meses difíciles durante la temporada de calor por la sequía que se presentó en los municipios.
El 12 de julio, la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) lanzó una declaratoria de inicio de emergencia por sequía en los estados de Sonora, Chihuahua, Coahuila y Baja California y sequía severa en Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí y Sinaloa.
La situación mejoró durante agosto, mes en el que se tuvieron bastantes precipitaciones en el estado, lo que permitió que las presas alcanzaran niveles óptimos.
De acuerdo con Sistema Meteorológico Nacional (SMN), la temporada más cálida en toda la República Mexicana se da en la primavera, que abarca de marzo a julio. Y si las lluvias escasean se agudiza el problema de la sequía.