Culiacán, Sin.- Las lecciones que la madre de Ileana Castro Miranda, le inculcó desde niña en la lucha de la sobrevivencia, la ha llevado por 30 años a hacer un cambio en la vida de cientos de desconocidos, principalmente la de niñas, niños y adolescentes migrantes-indígenas de los campos agrícolas de Sinaloa.
Ileana, de 53 años, ha aplicado y desarrollado proyectos de gestión en favor de la niñez, acompañando procesos de organización, cabildeo, e incidencias en políticas públicas en toda su trayectoria laboral, primero en un cargo directivo de Sedesol a nivel federal y después dirigiendo Save The Children en Sinaloa.
Conocedora de que una sociedad individualista no conduce a nada bueno, en sus más de 13 años contribuyendo desde la trinchera de gobierno, se especializó en temas relacionados con la actividad en los campos agrícolas; aspecto que llamó la atención de la organización internacional para que, en Sinaloa, ella abanderada el proyecto.
A la par que Ileana ya no compartía la visión del gobierno federal, por considerar que el trato era cada vez más deshumanizado, en 2007 por petición de Save The Children, se sumó como la primera dirigente en Sinaloa, empezando con el programa de atención a niños hijos de jornaleros agrícolas migrantes – indígenas.
LA HISTORIA
Para 2007, a simple vista parecía que el trabajo infantil en los campos agrícolas no existían en Sinaloa, por haber grandes agroexportadores que omitían esta información para seguir dentro del mercado internacional, pero que en la realidad sólo eran datos maquillados. De ahí, que Save The Children empezó a investigar en el núcleo del problema para erradicarlo.
“El tema de la explotación laboral infantil ha ido y venido y en aquellos momentos en el 2007 se hablaba poco, porque decían que ya no existía el trabajo infantil en Sinaloa, por supuesto, porque eso responde a los intereses de los agroexportadores que en aquellos años estaban muy observados”, recordó.
Por la trayectoria de Ileana, el ingreso a los campos agrícolas no era un problema, por lo que, junto con su equipo de nueva creación, fueron encontrando cuál era la realidad en Sinaloa, uno de los estados que a nivel nacional se destaca por ser el “granero de México”. Motivo por el que, Save The Children reforzó el trabajo en Culiacán, Navolato y la zona norte de la entidad federativa.
Más allá de ir sensibilizando a los agricultores para que no permitieran el trabajo infantil, dejarlos y volver después a ver resultados, la labor de Ileana ha sido el dirigir muchas mesas de trabajo para erradicar la explotación infantil e incidir en políticas públicas profundas para que se dé una reforma a la Ley.
REFORMAS
Fue hasta 2011 cuando se logró una reforma en la Ley del Trabajo, en la que se prohíbe el trabajo infantil a menores de 18 años en los campos agrícolas, cuando es permitido en otras labores a los 15 años, pero que, por estudios de Save The Children, se demostró que para los menores es perjudicial para su sano desarrollo.
Luego de años de aplicar diversos proyectos en los campos agrícolas, Ileana y sus colaboradores han logrado un cambio en la consciencia de los encargados y ahora, reconocen que los agricultores han hecho un esfuerzo para que las niñas, niños y adolescentes, tengan alternativas de protección, cuidado, alimentación y educación. Rubros en los que, aunque han avanzado, aún hay mucho camino por correr.
En 14 años al frente de Save The Children en Sinaloa, Ileana se ha enfocado también en la construcción de una cultura de paz en Villa Juárez, Navolato, por ser una zona en donde los niveles de violencia han sido elevados.
En lugar de llegar a hablar de prohibición y prevención de la violencia a los jóvenes de Villa Juárez, en 2013, el tema fue la paz, con el respaldo del programa “Constrúyete”, que implementaron en 2009, en el que los estudiantes de preparatoria crean un proyecto de vida basado en mejores relaciones y armonía. Actualmente, forma parte de los proyectos de la Secretaría de Educación Pública del nivel medio superior.
Al ser fundamental para Save The Children que todos los niños gocen de sus derechos, en atención a hijos de jornaleros agrícolas, han aportado también en brindar alimentación con comedores comunitarios, sobre todo para menores migrantes – indígenas, quienes por no tener una sana alimentación se ven afectados de manera significante en su salud.
“El poder brindar alimentación diariamente, desayuno y comida y colaciones dos veces al día a los niños y niñas de familias migrantes, ha sido verdaderamente todo un reto, todo un desafío, pero el impacto en la vida de los niños y las niñas, es inmediato, empiezan a recuperarse, a tener energía, a venir a la escuela, se sienten atendidos”, subrayó.
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Ileana se ha percatado como el brindar una atención adecuada a los menores, sin juzgarlos y escuchándolos como niños, es una de las claves para tener éxito en más de una década, logrando que las familias hagan adecuaciones en su estilo de vida y brindando mayor seguridad a los niños.
CASOS DE ÉXITO
Son varios los casos de éxito que Save The Children ha logrado en diferentes campos agrícolas y para Ileana, la historia de una niña de ocho años que estaba enojada con la vida y mostraba una actitud agresiva hacía todos, el cambio que se logró en su comportamiento gracias los talleres que impartieron, ha sido la motivación para muchos niños que llegan en las mismas condiciones.
Actualmente ella tiene 23 años y está por graduarse como Ingeniero Agrónomo, por sentir un aprecio hacia el campo, pero ahora desde otra trinchera. Además, se ha convertido en una vocera más de Save The Children dando asesorías a los niños que llegan con problemas.
“Y como ella hay más en más campos, pero lo tengo presente porque era increíble, era una niña totalmente enojada con la vida y con todos a quien se le atravesaba golpeaba, aventaba todo, no quería escuchar y saber nada de este mundo, estaba enojada y empezamos a revisar porque la conducta y bueno, fuimos trabajando con ella”, explicó.
El camino para la erradicación del maltrato infantil aún es largo, peor cada uno de los avances que se ha logrado gracias a Save The Children, se han convertido en la inspiración y el impulso de Ileana para seguir avanzando y asegurar que las niñas, niños y adolescentes gocen todos sus derechos.
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