Escuinapa, Sin.- En cada uno de los pueblos y municipios del sur de Sinaloa existen personajes que se han convertido en íconos de su tierra y han llegado a formar parte de su historia, aunque no sean artistas o tengan una profesión destacada.
Una de ellas es María de la Paz Castro Ocampo, mejor conocida como la “Pasita Lomis”, quien con su carisma y sencillez se hizo de un lugar en el municipio. Decenas de anécdotas rodearon su vida y construyeron su existir.
La “Pasita Lomis” era una mujer que a pesar de tener ya una avanzada edad, nunca dejó la coquetería ni la energía propia de una quinceañera.
De estatura pequeña, piel morena y cabello largo y oscuro, recorría las calles de su Escuinapa siempre con sus labios rojos, sus mejillas rosadas y de tacones, que al escucharlos sonar, ya todos sabían que se aparecería en cualquier momento.
Siempre iba acompañada de su hermana de nombre Julia, ya que a pesar de que contaba haber tenido infinidad de enamorados, la Pasita nunca llegó a contraer matrimonio o formar una familia. Julia, junto a otro hermano (Zefero), se convirtieron en sus compañeros de vida.
Aunque no tuvo hijos, platicaba que le tocó cuidar y criar a varios sobrinos, hijos de hermanas y hermanos, a quienes decía los quería como si e.la los hubiera “parido”.
Otra de las características que tenía la Pasita era de que no había escuinapense que no tuviera un parentesco con ella, ya que su árbol genealógico siempre encontraba lugar en las personas que la abordaban para cualquier cosa.
La Pasita nunca perdió esa energía que contagiaba a cualquier persona. Todos, al observarla, se sorprendían de ver las ganas de vivir que siempre tenía esta peculiar mujer quien nunca perdió su glamour.
Este jueves 23 de julio los padecimientos de salud que tenía pusieron fin a su vida. Así, la Pasita Lomis pasó a formar parte de la historia escuinapense, al ser ya uno de los personajes emblemáticos del municipio y comparada con otros como el “Güilo” Mentiras o Kalimán.
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Ya no se le verá por la plazuela, tampoco se escuchará el ruido de sus tacones por las calles, su carisma y “gamour” brillarán ahora en otro sitio. A sus 73 años, dejó una huella difícil de borrar.
PARA SABER
María de la Paz Castro Ocampo, mejor conocida como la “Pasita Lomis”, murió el jueves 23 de julio a la edad de 73 años.
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