Culiacán, Sin.- Trabajadores de la Fiscalía General del Estado que participaron en las indagaciones del caso Cuen Ojeda, emitieron una carta abierta para solicitar que no sean tomados como "chivos expiatorios", después que la Fiscalía General de la República acusó al ente estatal de fabricar pruebas.
La FGR atrajo el caso después de que el gobernador Rubén Rocha Moya y el ex presidente Andrés Manuel López Obrador hicieran la petición.
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Esta investigación causó sospechas en la sociedad civil después de que Ismael "El Mayo" Zambada García publicó una carta en la que relataba que se encontró con Cuen el 25 de julio, día de su detención y traslado a Estados Unidos.
El presunto capo sinaloense relató que el político y ex rector de la UAS fue asesinado en Huertos del Pedregal, mismo sitio donde fue secuestrado y llevado a la Unión Americana.
La propia FGR después ubicó como probable escena del crimen el sitio señalado por Zambada en su carta.
Poco después de atraer la investigación, señaló inconsistencias en las indagaciones iniciadas por la FGE, como el hecho de haber permitido incinerar el cuerpo de la víctima y no realizar las pruebas periciales debidas al vehículo involucrado en el crimen.
La hipótesis inicial del crimen fue que a Cuen lo asesinaron en un intento de robo de vehículo la noche del 25 de julio, en la salida norte de Culiacán, versión que fue descartada por la FGR y que sirvió de sustento en la acusación de montaje por parte del personal de la Fiscalía sinaloense.
Tras revelar las inconsistencias, Sara Bruna Quiñónez Estrada renunció al cargo de fiscal general.
El domingo 20 de octubre, la FGR brindó un informe sobre los avances, en donde detalló que se buscó, con el Poder Judicial, girar órdenes de aprehensión contra personal de la FGE, pero un juez federal se negó.
Esto derivó en otra controversia con el organismo de procuración de justicia y el Poder Judicial, ya que este último negó haber tomado la postura señalada por la FGR.
Este martes 22 de octubre, el personal de la FGE hizo pública una carta en donde expuso la tesis de ser utilizados como “chivos expiatorios”.
En la misiva se esclarece que los peritos y ministerios públicos desahogaron la primera línea de investigación, la cual fue el asesinato derivado del intento de despojo del vehículo de Antonio Corrales.
Este último fue el testigo que brindó la versión a la autoridad, se precisa en la carta.
“Hemos acudido puntualmente cuando se nos ha citado por la autoridad ministerial, sin que hasta el momento se nos permita acceso alguno a las constancias del expediente, a pesar de haber comparecido con la calidad de imputados”, se indicó en la carta firmada por el personal de la FGE.
Aunado a esto, se destacó la negativa de proporcionar copia de la indagatoria para realizar una defensa técnica y se expuso el temor de “ser utilizados como chivos expiatorios en dicho asunto, con base en una investigación sesgada de la autoridad federal”.
Involucran a Rocha
En la carta de "El Mayo", refiere que aquel 25 de julio se iba a reunir con Cuen Ojeda y el gobernador Rubén Rocha Moya.
Rocha es objeto de la crítica de periodistas, quienes lo señalan por un presunto vínculo con Zambada, aunque el gobernador ha declarado que su asistencia a la reunión es una mentira y que ese jueves estaba fuera del país.
Incluso, informó haber comparecido ante la FGR y después difundió algunos datos que confirman que ese día viajó a Estados Unidos con su familia en un avión del empresario Jesús Vizcarra.
