Por incendios y explosiones, están en riesgo embarcaciones del parque Bonfil en Mazatlán

Los accidentes que se han registrado este año evidencian que este recinto pesquero no cumple con las medidas esenciales de seguridad para realizar reparaciones a la flota camaronera de Mazatlán

Marimar Toledo | El Sol de Mazatlán

  · lunes 31 de julio de 2023

Sin medidas de seguridad estrictas, en el muelle del Parque Bonfil se llevan a cabo trabajos de mantenimiento que pueden poner en riesgo a las personas que se encuentran en la zona. Foto: Fausto McConegly | El Sol de Mazatlán

Mazatlán, Sin.- Los trabajos de reparación y mantenimiento en las embarcaciones camaroneras que se llevan a cabo en el muelle pesquero del Parque Bonfil de Mazatlán se realizan en alerta roja, ya que el riesgo de que pueda registrarse una catástrofe es grande.

El pasado 23 de marzo de 2023 inició la veda del camarón en el Pacífico mexicano y desde entonces se han registrado cuatro incendios en barcos y la muerte de un soldador que reparaba un tanque de diesel de un buque.

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Los incendios y explosiones que se han suscitado en el muelle evidencian que este recinto pesquero es una bomba de tiempo que no cumple con las medidas esenciales de seguridad, además de que no hay gente capacitada en el lugar para poder enfrentar una emergencia de grandes dimensiones.

Y todo esto pasa ante la mirada cómplice de las autoridades responsables, que no multan ni sancionan a quien no siga al pie de la letra los reglamentos de seguridad en la zona.

En los últimos cuatro años, según cifras de Bomberos, se ha registrado al menos un incendio en la zona del muelle durante la temporada en la que se realizan los trabajos de mantenimiento (julio, agosto y septiembre), además de otros incidentes menores, por no seguir los lineamientos de seguridad.

El riesgo ha estado latente, pues con un incendio podría configurarse en cadena una explosión de las 350 embarcaciones que se encuentran amarradas en el muelle, algo que sin duda sacudiría a Mazatlán como destino turístico.

Peligro ante el fuego

Eran pasadas las 11 de la mañana del 18 de julio, un día normal en el que nadie imaginaba que una tragedia ocurriría en el muelle pesquero del Parque Bonfil y mucho menos que Juanito, de 47 años de edad, quien apenas tenía una semana trabajando en el lugar, perdería la vida al explotar el tanque de diesel donde realizaba los trabajos de soldadura.

Marcos, quien tiene 40 años de pescador y 30 de ellos como motorista de una embarcación, estaba unos barcos más delante de donde ocurrió la tragedia. Escuchó el estruendo y junto a otros compañeros corrió a querer auxiliar a Juanito, pero el humo no los dejó avanzar.

El soldador realizaba un trabajo de rutina y la verdad es que no me explico cómo explotó el tanque, son accidentes que pasan, que nadie espera o desea que sucedan”, lamentó.

De los 300 barcos que conforman la flota camaronera del puerto, en aproximadamente un 5 por ciento se llevan a cabo trabajos de mantenimiento. Foto: Fausto McConegly | El Sol de Mazatlán

La mayoría de los trabajadores realizan sus labores sin un equipo especial, como cascos, guantes o ropa adecuada. Sólo los soldadores se ponen su careta, pero las condiciones no son las más adecuadas para trabajar.

Seis días antes se había registrado un incendio dentro del barco Don Adolfo, luego de que una chispa que cayó en la madera se propagó dentro de la embarcación. Esa vez no hubo personas lesionadas, sólo daños materiales.

Los bomberos que acudieron a la emergencia señalaron que si no se hubiera reportado el incidente a tiempo el fuego se habría propagado rápidamente hacia las demás embarcaciones.

Medidas necesarias

Para el presidente de la Unión de Armadores del Litoral del Pacífico, Jesús Omar Lizárraga Manjarrez, son lamentables los dos hechos registrados en este mes de julio, primeramente el incendio (ocurrido el día 12 de julio) y después el fallecimiento del soldador.

Asegura que es la Capitanía de Puerto la encargada de regular y vigilar las reparaciones menores de los barcos y que incluso para hacerlas tienen que sacar obligatoriamente un permiso.

"Obviamente nosotros siempre tratamos de tener los cuidados necesarios para salvaguardar la vida de la gente que trabaja arriba de las embarcaciones y obviamente ahorita estamos pidiendo a los pocos compañeros que están realizando labores de mantenimiento y reparación que tomen las precauciones necesarias, que no pasen las situaciones que se han suscitado los últimos días", detalló.

Lizárraga Manjarrez explicó que todos tienen la obligación de meter los barcos a los astilleros cada dos años y medio, para realizar reparaciones mayores como parte de la seguridad.

Ahí en este caso siempre se ha tenido la oportunidad de realizar las reparaciones a flote, obviamente las que se pueden realizar ahí, pero se tienen que seguir las normas de seguridad.

En Mazatlán hay varios astilleros, lo que no hay es el recurso económico para darle el mantenimiento a las embarcaciones, ahorita como ya se conoce, es lamentable la situación que pasa la actividad pesquera", resaltó.

Aumenta el riesgo

Saúl Robles Chávez, segundo comandante del Cuerpo Voluntario de Bomberos de Mazatlán, señaló que es en esta temporada, julio y agosto, cuando se incrementan este tipo de emergencias, ya que por mes se llegan a registrar dos llamados de auxilio de este tipo.

"Los incendios de barcos podemos llegar a tener uno o dos al mes y los últimos días de veda son los que más nos preocupan, porque es cuando se incrementa el riesgo, cuando están a marchas forzadas para salir. Es cuando le empiezan a echar más ganitas a las reparaciones y nos preocupa que no tienen medidas de seguridad", explicó.

Mencionó que las embarcaciones deben entrar al astillero a realizar los trabajos de reparación, o de lo contrario deben de implementar ellos mismos las medidas de seguridad, pero lamentablemente lo hacen sobre la marcha del barco, atraca en el muelle y ahí mismo es donde hacen las reparaciones.

Robles Chávez reconoce que por muchos años se ha realizado en el muelle de Mazatlán esta mala práctica y no se ha podido erradicar, a pesar de que ha dejado muchos accidentes cada temporada.

Sólo los soldadores se ponen su careta, pero las condiciones no son las más adecuadas para trabajar. Foto: Fausto McConegly | El Sol de Mazatlán

Recomendaciones

El comandante de la corporación de auxilio recomendó a las tripulaciones y a los propietarios de las embarcaciones que aumenten el nivel de seguridad para hacer este tipo de trabajos.

"La responsabilidad de los dueños de los barcos es poner a gente que supervise estos trabajos y sobre todo que se limpien muy bien las áreas del muelle, porque en un momento dado se puede dar una emergencia en el área de muelle donde hay llantas, redes, jabas y un montón de cosas almacenados sin ninguna necesidad y eso puede entorpecer el trabajo de los socorristas", resaltó.

Además, lo ideal sería no almacenar tanto combustible en el muelle y que las medidas de seguridad de los trabajos que van a efectuar realmente sean implementadas y que busquen gente capacitada para resguardar el área.

El material que se usa en estos trabajos de reparación es de mucho riesgo y lo ocurrido cada temporada previo a las capturas del camarón, obliga a tomar cartas en el asunto antes de llegar a una tragedia que sea mayor.

Esta situación preocupa a quienes trabajan o pasan gran tiempo en el muelle, ya que es un peligro que este tipo de material quede expuesto, debido a que es altamente flamable y puede generar un incendio muy fácilmente.

Poca actividad, pero…

En la actualidad la actividad en el Parque Bonfil de Mazatlán es tranquila, ya que de los 300 barcos que conforman la flota camaronera del puerto, en aproximadamente un 5 por ciento se llevan a cabo trabajos de mantenimiento.

Sin embargo eso no da tranquilidad a las personas que laboran en la zona, ya que una explosión, por mínima que sea, puede provocar una catástrofe de grandes dimensiones.

Las actividades fuertes en las embarcaciones comienzan a finales de julio y en agosto ya se verá a los trabajadores realizando sus tareas a bordo de sus barcos, hasta mediados de septiembre, que es cuando salen a pescar”, aseguró Francisco Castillo López, director del Refugio Pesquero y Administración del Parque Bonfil.

Datos

4 incendios de barcos se han registrado de marzo a julio


1 muerte de un soldador que reparaba un tanque de diesel


2 llamados de auxilio por diversas emergencias en el Parque Bonfil atienden al mes los Bomberos durante julio y agosto

Regla

Las embarcaciones deben entrar a algún astillero a realizar los trabajos de reparación, para no poner en riesgo a toda la flota que se encuentra en el muelle.