Presumen despliegue de más de 10 mil militares en Sinaloa

Se suman unidades blindadas y 8 helicópteros para contener el estallido de violencia que inició el 9 de septiembre

Redacción / El Sol de Mazatlán

  · jueves 14 de noviembre de 2024

Militares en recorridos por Culiacán.Foto: Iván Medina / El Sol de Sinaloa

Mazatlán, Sin.- Desde el 9 de septiembre el Gobierno federal mantiene en Sinaloa un despliegue de más de 10 mil militares de las cuatro ramas armadas para contener la inseguridad en la entidad.

A través de un comunicado, el gabinete de seguridad informó este jueves que el personal del Ejército, Marina, Fuerza Aérea y Guardia Nacional está desplegado en los principales sitios donde la violencia se ha recrudecido por el pleito que estalló el 9 de septiembre entre dos facciones del cártel de Sinaloa.

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Incluso, este miércoles por la noche arribó a Culiacán un nuevo contingente de 100 soldados en un avión de la Guardia Nacional para sumarse a los patrullajes.

“También se envió una unidad de Fuerzas Especiales integrada por 100 elementos, con lo que se refuerza la presencia militar en esa zona, con lo que se suma un estado de fuerza de más de 10 mil efectivos del Ejército, Fuerza Aérea y Guardia Nacional, así como ocho aeronaves”, refiere el comunicado del gabinete de seguridad.

Los municipios más violentos en este escenario son Culiacán, Elota, Mazatlán y Navolato.

Se suman a estos cuatro Concordia, San Ignacio y El Rosario, en la zona sur.

Junto con los militares se han desplegado ocho aeronaves en apoyo a los patrullajes terrestres.

Del 9 de septiembre a la fecha se tiene el registro de al menos 7 militares en enfrentamientos con civiles armados, principalmente en el centro del estado.

En conjunto con el Gobierno del Estado se han establecido cinco puntos de control en la zona urbana de Culiacán, además de uno sobre la autopista Mazatlán-Culiacán y en las inmediaciones del túnel El Sinaloense, en la autopista Durango-Mazatlán.

En estos tramos carreteros se han registrado enfrentamientos y bloqueos con unidades incendiadas, lo que ha provocado pérdidas al transporte de pasajeros y de carga, y a automovilistas particulares.

La cifra de asesinatos y personas privadas de la libertad ya rebasa los 400 en ambos casos, de acuerdo con organizaciones civiles y de derechos humanos.