Mazatlán, Sin. -Aunque la obra prometida hace años ha sido un tema prioritario en la agenda gubernamental, la construcción de un cárcamo, canal o dren pluvial que dé solución a las inundaciones de la zona El Toreo y el fraccionamiento El Cid sigue pendiente, a pesar de que las casas, vehículos y propiedades de los vecinos de esta zona quedan bajo el agua, cada vez que llueve.
En los dos últimos años, el nivel del agua en algunas zonas subió hasta un metro de altura en las casas que se encuentran entra la avenida de La Marina y Circunvalación, dañando vehículos, muebles y viviendas, las más fuertes se registraron los días 27 de julio y 28 de noviembre de 2019, y el 11 de septiembre de 2020.
El problema existe desde hace más de 30 años, los afectados están hartos de tocar puertas, de exponer el problema en reuniones y cabildo abierto, por lo que han decidido ser la piedra en el zapato y la misma sombra de funcionarios públicos que acudan a eventos oficiales donde haya banderazo o corte de listón de obras, hasta que su situación sea resuelta.
Ya lo han hecho con pancartas, mantas y cartulinas en mano, al apostarse en las obras de la avenida Rafael Buelna y en el arranque de la ciclovía Sábalo-Cerritos, con la siguiente leyenda: “Sr. Gobernador, cumpla su promesa. Vecinos de El Toreo, exigimos arreglen problema de las inundaciones”.
María del Carmen Pardo Sibrián y Amalia Venegas, vecinas y afectadas del fraccionamiento El Toreo, han sido punta de lanza y voceras del grupo en las manifestaciones, quienes aseguran que seguirán “picando piedra” en defensa de sus familias que ven en peligro sus propiedades y seguridad ante las inundaciones por lluvias.
“Ya tenemos un proyecto bien implementado para que autoricen los recursos y esto se haga, hay la promesa de que, en el presupuesto de este año, entraríamos a él, nosotros no vamos a quitar el dedo del renglón, si es necesario vamos a ir hasta Culiacán, a la Ciudad de México, a donde sea necesario porque ya es mucho lo que hemos pasado, y cada vez las aguas se nos acumulan más”, expresó Pardo Sibrián.
El conflicto se debe a que en El Toreo convergen tres canales: el que baja de la avenida Rafael Buelna y La Marina, pasa por Sánchez Celis, Alameda y parte de lo que es López Mateos, y se une en lo que es la zona de El Toreo, Soriana Toreo, Jardín El Toreo, el mismo Toreo, y va y desemboca en el canal del Cetis 123.
Otro es el canal que corre desde Pueblo Nuevo, parte de la Sánchez Celis y Francisco Villa, y desciende por la avenida Francisco Solís, el cual capta todos los escurrimientos que vienen de la Bicentenario, la Francisco Villa, Mangos 1 y 2, Puestas de Sol, hasta llega al plantel Cetis.
Y el tercero, el que viene del otro extremo de Dorados de Villa.
Toda esa agua se junta y topa contra la barda, las rejillas y la compuerta de desagüe pluvial del El Cid, que a palabras de los vecinos de El Toreo cierran el paso de un canal natural en tiempos de lluvias y acumula basura, afectando los dos fraccionamientos con severas inundaciones.
Hemos perdido carros, muebles, tenemos las casas deterioradas, porque hay partes donde entra el agua hasta casi un metro y es cada año este problema María del Carmen
Ella asegura que el problema es la obstrucción de la afluencia del arroyo o canal que pasa por El Toreo, al cerrar las rejillas en El Cid.
“Ellos están infringiendo las normas de la Comisión Nacional del Agua, ya nos hemos comunicado con la gente de El Cid, pero ellos han hecho resistencia, no sé en qué se apoyan, pero nosotros vamos a acudir a la Comisión Nacional del Agua para que intervenga”, señaló.
DAN LARGAS A PROYECTO
Amalia Venegas indicó que la promesa de resolver esta situación de desagüe del agua se dio desde el año 2019 por parte del gobernador Quirino Ordaz Coppel, el secretario de Obras Públicas del Estado, Osbaldo López Angulo, y el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres, sin embargo, a la fecha no se tiene nada concreto, salvo el proyecto.
Incluso, el planteamiento se hizo público el 13 de diciembre de 2019, durante la sesión de Cabildo Abierto número 7, ante regidores, funcionarios y el presidente municipal de Mazatlán.
Ahí, el alcalde reconoció que existe un proyecto con el gobierno estatal para evitar que el agua pluvial suba en las lluvias. Y el compromiso fue que la compuerta de El Cid ya no se cerraría durante las lluvias para que fluyera el agua y no se tapara la alcantarilla pluvial, así como la elaboración de un proyecto viable de solución.
Las dos propuestas entregadas por la Dirección de Obras Públicas municipales son: uno, encausar las aguas hacia un canal a cielo abierto por el sitio en el que corre el arroyo natural dentro de El Cid, desde la confluencia de la avenida Francisco Solís con la avenida Canseco, que es donde convergen 3 canales para de ahí seguir al interior de El Cid, entre calle de la Tizona y Circuito Campeador.
Y dos, hacer un ducto pluvial a través del camellón de la avenida Canseco, entre Toma de la Polvadera y Arroyo Tiro Cuates. Ambos proyectos están listos, pero todavía no se tienen recursos para aplicarlos, el primero requiere de una inversión de cuando menos 36.5 millones de pesos y el segundo, de 51.7 millones de pesos.
Desde entonces, solo se han visto obras de remodelación de avenidas en las que se invierten millones de pesos, como son la Rafael Buelna, la Camarón-Sábalo y más recientemente el inicio de la construcción de ciclovías en avenidas Canseco y Sábalo-Cerritos.
"Están haciendo obras de millones de pesos y nuestra petición es que tenemos más de 30 años inundándonos en El Toreo y cada obra que se construye nosotros nos quedamos más abajo del nivel, porque las obras que se hacen tienden a subirlas", señaló Amalia.
PROYECTO EN FORMA
El director de Obras Públicas municipales, Juan de Dios Garay Velázquez, indicó que la dependencia a su cargo recibió la encomienda de revisar el caso y elaborar un proyecto de solución al problema, para lo cual se hicieron levantamientos y un cálculo hidrológico, que se concretó con dos alternativas: el revestimiento del canal pluvial "El Cid" y un ducto pluvial en avenida Carlos Canseco.
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Descartó el proyecto original de un cárcamo, ya que este no solucionaría el problema de fondo.
“La solución es abrir la compuerta que hay en El Cid porque es un obstáculo y en ocasiones ha sido responsable al aglutinar basura y obstáculos de que se remanse el agua e inunde El Toreo, esa compuerta no debería de existir, es un obstáculo a un canal natural, y la otra opción, si no se quiere abrir totalmente esa compuerta es derivar líquido por la Canseco con un ducto pluvial”, concluyó.
El siguiente paso es decidir qué proyecto es más viable, después fijar los recursos y por último, proceder a la construcción. Los vecinos aseguran que por promesas no ha quedado, lo que falta es poner manos a la obra.
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