Ante el aumento considerable de violencia familiar, es necesario atender las causas que conllevan a este delito, no solo los efectos, señaló el coordinador general del Consejo Estatal de Seguridad Pública, Miguel Calderón Quevedo.
En lo que va de este año se han presentado mil 685 denuncias por el delito de violencia familiar, lo que representa un 41 por ciento más en la incidencia en comparación con el mismo periodo del año anterior, cuando se registraron mil 198 denuncias.
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Por lo anterior es necesario atender y erradicar todas las formas de violencia que se ejercen en el interior de los hogares, tanto física y verbal como psicológica. Para ello es necesario atender las causas que originan este delito, expresó el coordinador general del CESP.
“Si nosotros revisamos cómo van los datos de las denuncias, vemos que la violencia familiar sigue al alza”, sostuvo.
El exhorto fue a Gobierno del Estado, especialmente a la Secretaría de las Mujeres, la institución encargada de velar por la seguridad, bienestar y desarrollo integral de las mujeres, niñas y adolescentes de la entidad.
Se le solicitó a esta institución que fortalezca la parte preventiva de este delito, con programas de intervención en las comunidades y zonas de mayor incidencia, en los municipios de Culiacán, Mazatlán, Ahome, Guasave y Navolato, mismos que se encuentran en declaratoria de alerta de género debido a la incidencia de violencia familiar y feminicidios.
“Además de incrementar y elevar la infraestructura de atención a casos de violencia familiar, es necesario eficientar la parte preventiva en este delito, con programas de intervención específica en los sectores de mayor incidencia”, señaló Calderón Quevedo.
El Consejo Estatal de Seguridad Pública también realizó recomendaciones a la Secretaría de Educación Pública y Cultura y la Secretaría de Economía, esto a fin de promover el desarrollo integral de la familia y el entorno donde se genera la violencia.
“Recomendamos impulsar el desarrollo económico, así como acercar y facilitar el acceso a la educación con programas que generen y potencialicen el desarrollo integral del individuo, la familia y su entorno, principalmente en las zonas de menor nivel socioeconómico y rezago educativo”, expresó el coordinador general.
Es necesaria también la organización y participación ciudadana a través de los comités vecinales de autocuidado, las redes de apoyo y comunicación en las colonias y comunidades, fomentar la cultura de la denuncia ante cualquier delito del que sea víctima o testigo y utilizar la línea de emergencia del 911 para solicitar ayuda ante emergencias reales.
