Mazatlán, Sinaloa.- Un merecido homenaje recibió Don Raúl Bernal Tirado, en el Mercado Pino Suárez, recinto que fue su segunda casa durante su vida, al ser arduo trabajador y tener su negocio La Nueva Gloria en él.
Familiares, amigos, locatarios, todos con evidente dolor por la pérdida de un hombre que fue amable, caballeroso y muy trabajador durante su existencia.
Su cuerpo arribó al mercado donde ya lo esperaban sus seres queridos, quienes le brindaron cálido aplauso por su partida. Momentos después, subieron su cuerpo para dirigirlo a la Parroquia de San Carlos Borromeo, a donde lo acompañaron para recibir la bendición de Dios, en el segundo domingo de adviento, un día especial mencionó el sacerdote Rafael Martínez Gallardo, quien explicó que quien muere en tiempo de cuaresma o adviento, tiene un privilegio especial. “Recibe el abrazo tierno y cariñoso de nuestro Padre”.
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Así mismo, pidió por el eterno descanso de Don Raúl y pidió especialmente por los seres que le sobreviven. Afirmó, que Cristo es el camino que lleva al Padre: la verdad en su Palabra y la vida que viene del padre. “No nos cansemos de acompañarnos los unos con los otros. No olvidemos la calidez humana. Busquemos lo que nos une al ser humanos”.
Al final de la celebración católica se le brindaron cálidos aplausos a Don Raúl de parte de su gente.
Después de la emotiva misa, Don Raúl Bernal fue trasladado en la carroza fúnebre al lugar que sería su última morada, al panteón Renacimiento.
Al llegar una banda lo esperaba y lo encaminó hasta su sepultura, canciones como ‘La vida no vale nada’, ‘El Muchacho Alegre’ y muchas otras entonaron en su honor.
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Momentos duros pero llenos de esperanza vivieron sus familiares, al despedir al querido Don Raúl Bernal. Descanse en paz.
IMPRESIONES
“Un momento muy difícil sinceramente, no tengo palabras. Una persona muy querida. Él es mi abuelo y no le tocaba el paquete de ser padre, y fue un excelente padre. Un excelente amigo”. Su nieto Raúl.
“Fue una gran persona. Hizo mucho por nosotros los locatarios. Trabajó por muchos años. Una persona maravillosa con una riqueza espiritual para todos. Una persona muy querida”.
Rosario Robles, locataria.
“Buena persona. Muy triste su muerte. Estuve ayer en su velorio en Renacimiento”. Janeth, vecina de local.