Mazatlán, Sin.- En los últimos días Mazatlán ha sido testigo de una serie de incidentes protagonizados por elementos de la Policía Municipal, que han despertado preocupación en la comunidad.

Rigoberto Pérez, psicólogo con más de cinco años de experiencia, señaló que estos comportamientos pueden tener múltiples causas, entre las que destacan problemas en el hogar, traumas pasados, corajes acumulados, exigencia y una carga emocional significativa.

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Pérez subrayó que el factor más común detrás de estas conductas es el deterioro de la salud mental de los agentes.

A pesar de que se afirma que los oficiales reciben capacitación y tratamiento constante, esto no se ve reflejado en su comportamiento cotidiano.

“Los policías, como cualquier otro ser humano, enfrentan problemas personales que pueden influir en su desempeño profesional, y esto es algo que no se está abordando adecuadamente", mencionó el psicólogo.

El especialista explicó que muchas de estas conductas de abuso de poder tienen como objetivo reducir la incertidumbre y aumentar la sensación de seguridad entre los miembros del cuerpo policial.

"Es una respuesta a la presión interna y externa que enfrentan diariamente. Los oficiales, en su mayoría, buscan protegerse a sí mismos y a sus compañeros de las amenazas percibidas, lo que desafortunadamente puede derivar en acciones excesivas o inapropiadas", añadió Pérez.

La situación pone en evidencia la necesidad de una revisión profunda de los programas de apoyo psicológico y capacitación dentro de la Policía Municipal.

"No se trata solo de entrenar en habilidades técnicas, sino de proporcionar un apoyo integral que incluya la salud mental como una prioridad. Los oficiales necesitan sentir que tienen los recursos y el apoyo necesarios para manejar el estrés y los traumas asociados con su trabajo," concluyó Pérez.