Mazatlán, Sin. - Sinaloa busca ser punta de lanza a nivel nacional en intercambiar experiencias y proponer acciones para desarrollar un turismo sustentable, sostenible y competitivo en destinos rurales.
Y esto será posible gracias a que se realizó la firma del Convenio de Hermanamiento de los Pueblos Mágicos que beneficiará a los municipios de Mocorito, El Fuerte, Cosalá y El Rosario.
Según se informó en un comunicado de prensa, la firma del hermanamiento estuvo encabezada por la Secretaria de Turismo de Sinaloa, María del Rosario Torres Noriega; María Elizalde Ruelas, Claudia Liliana Valdez Aguilar y Carla Úrsula Corrales Corrales, presidentas municipales de Mocorito, El Rosario y Cosalá, respectivamente; Claudia Castañeda, en representación del Alcalde de El Fuerte, Gildardo Leyva y los presidentes de los comités ciudadanos de Pueblos Mágicos en Sinaloa.
La Secretaria de Turismo destacó el beneficio de compartir lo que se hace para mejorar la actividad turística, acción vital sobre todo hoy pues Los Pueblos Mágicos lograron despertar el interés de tour operadores durante la pasada edición del Tianguis Turístico.
Destacó el trabajo coordinado con otras dependencias del gobierno del estado para escuchar las necesidades de los sectores y avanzar en el desarrollo de los 18 municipios. “Con la firma del hermanamiento vamos a trabajar de la mano en lo que sea necesario para que le vaya mejor a Sinaloa”, dijo.
Al evento asistió el Presidente de Comités Ciudadanos de Pueblos Mágicos, A.C., Carlos Jesús Gómez Flores, quien destacó el carácter “histórico” de la reunión porque el turismo es la tabla de salvación, la puerta para la paz, para la inclusión, la puerta para vivir mejor. “El desarrollo sustentable es volver a nuestro origen, a nuestras costumbres, a lo que nos hace ser, a tener prácticas inteligentes en el turismo”, enfatizó.
Gómez Flores destacó que el bienestar generado por el turismo debe ser para toda la comunidad, no sólo para dueños de restaurantes, hoteles y comercios, sino también para las familias que de manera modesta producen artesanías, dulces, entre otros productos.
“El 2022 es el año del turismo rural y afortunadamente en Sinaloa no hay rascacielos, hay mar, océanos y una tierra fértil, que da un gran poder a este territorio, la cuestión es volver a ser lo que antes éramos, pero con una visión moderna”.
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