Culiacán, Sin.- Junio ha sido el mes en el que Sinaloa ha dado un paso atrás en la eficacia de los protocolos sanitarios, al pasar del semáforo epidemiológico color verde, al amarillo, con un mayor riesgo de contagios de coronavirus en la entidad federativa.

Por unas semanas, las autoridades sanitarias presumieron como en el estado se habían disminuido los contagios y los decesos a causa del Covid-19, lo que permitía que los establecimientos y Centros Comunitarios de Aprendizaje (CCA) recibieran un mayor número de personas.

Sin embargo, aunque aún no se ha confirmado oficialmente que el aumento que se registra es efecto colateral de las campañas políticas, la misma ciudadanía ha dicho que este es un reflejo que apenas se inicia a observar.

En ese sentido, la expectativa que tiene la población sinaloense es que en las próximas dos semanas, el repunte de casos será más significativo, mientras que las autoridades de salud están a la espera de ver los resultados.

El Secretario de Salud, Efrén Encinas Torres, ha declarado que desde el inicio del proceso electoral se corría el riesgo de un aumento de contagios por las reuniones de políticos con un gran número de personas, tal y como ha sucedido en otros estados y países y en donde, Sinaloa no iba a ser la excepción.

Ahora que Sinaloa ha permanecido en el color amarillo y Culiacán en rojo de acuerdo al panorama estatal, con 114 casos, la Secretaría de Salud, ha reforzado la vigilancia epidemiológica y aunque se iban a suspender eventos masivos, finalmente se tomó la decisión contraria, yendo en contra de la orden de gobierno federal.

En los reportes diarios de salud estatal, se analiza que junio se inició con 44 nuevos contagios, rango que se ha mantenido de 37 a 58 nuevos casos diarios; mientras que en decesos registrados en plataforma ha fluctuado entre tres y 11 muertes.

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