A más de un mes de haber colocado los topes delimitadores del carril preferencial para el transporte urbano sobre la avenida Ejército Mexicano, de Insurgentes a Gutiérrez Nájera, los choferes del transporte público no lo utilizan al 100 por ciento.

En un recorrido realizado por El Sol de Mazatlán se constató que este carril que es exclusivo para los camiones y taxis, es utilizado en su mayoría por automóviles y motocicletas.

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Los camiones circulan en zig zag, entran y salen de él, ya que la mayoría lo utilizan sólo para subir y bajar pasaje, motivo por el cual muchos delimitadores ya se encuentran deteriorados; además de que los automóviles continúan estacionándose en la zona "prohibida".

El presidente de la Alianza de Camiones Urbanos y Suburbanos de Mazatlán, Faustino Mejía, reconoció que los choferes, a pesar de que trabajan en la concientización de cultura vial, no acatan las indicaciones.

“Ya se les han dado cursos sobre cultura vial, para que obedezcan la señal. Somos los primeros que debemos de poner el ejemplo, sobre todo en el tema de evitar accidentes. La autoridad está haciendo muy buen trabajo y ahí vamos educándonos todos. Es lo mejor que podemos hacer para quitarnos un problema vial en ese sentido”, dijo.

Uno de los problemas que más se ha presentado sobre el carril preferencial es que los vehículos, tanto particulares como de transporte público, que se siguen estacionando sobre esa área delimitada, específicamente a la altura del Seguro Social del IMSS.

“Sigue siendo algo que tenemos que ir trabajando a diario. Hemos trabajado de parte de la autoridad e incluso a nuestros mismos vehículos que estaban fuera del carril se les invitó a moverse y de hecho se les hizo infracción”, dijo Faustino Mejía.

Para saber

Este proyecto piloto del carril preferencial inició en noviembre de 2022, pero fue a principios de año cuando empezó a pintarse la línea amarilla, meses después se colocaron los topes delimitadores y lleva ya un mes operando de forma oficial.

Son tres kilómetros en los que se implementó esta medida, la cual fue rechazada por la mayoría del sector comercio de la zona, al quitarles los espacios para que sus clientes se estacionen.