Mazatlán, Sin.- Vendedores de playa de seis organizaciones de Mazatlán realizaron este lunes una manifestación en el Parque Bonfil por el supuesto acoso y hostigamiento por parte de los inspectores de Oficialía Mayor del Ayuntamiento.
El dirigente del Sindicato de Vendedores de Playa adheridos a la CTM, Jorge Luis Ríos Rubio, denunció que el gremio ha sido víctima de abuso de poder, al ser frecuentemente multado, además de que algunas veces hasta les han decomisado su mercancía.
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Manifestó que son poco más de 800 vendedores los que tienen este problema desde el periodo vacacional de verano, por lo que buscarán un amparo colectivo en contra del Ayuntamiento.
"Vamos a buscar asesoría jurídica por primera vez en la historia de ser vendedor y si es necesario nos vamos a amparar contra el Ayuntamiento, porque no entienden, se hacen acuerdos y no respetan, nos están mermando la economía familiar. El Ayuntamiento nos está hostigando, multando, quitando mercancía y es pura merma, porque lejos de aprovechar las vacaciones, nos dan en la torre", dijo.
Ríos Rubio señaló que no se actúa en contra de los inspectores, quienes se creen los dueños de la zona federal.
"Las multas que ponen varían entre 500 y 700 pesos y según ellos nos hacen un descuento del 50 por ciento, es algo recaudatorio y sobre todo son funcionarios municipales y deberían aceptar críticas de nosotros, con esta manifestación vamos a tener represalias, mañana estarán encima de nosotros", expresó.
Comerciantes sin permisos
El dirigente de los vendedores de playa afiliados a la CROM, Mario Raymundo Martínez, agregó que existe la presencia sin control de personas sin permiso, quienes aseguran que son tolerados por la autoridad municipal y por la ausencia de inspectores federales.
Indicó que cualquier persona que quiera trabajar se mete a la zona de playa, ya que está libre, pues no existe inspección de parte de personal de Semarnat y Profepa.
"Tanto la autoridad federal como el Ayuntamiento de Mazatlán no están interviniendo para nada y todo el año han recurrido tanto a la Profepa como al Ayuntamiento, pero no han tenido ninguna respuesta", concluyó.