Culiacán, Sin.- Esta noche las autoridades confirmaron un total de 15 personas muertas en la sindicatura de Tepuche en dos hechos aparentemente distintos, uno ocurrido entre La Mojonera y La Vainilla, y otro más un ataque indiscriminado en Bagrecitos.
Desde temprano, el secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, teniente coronel Cristóbal Castañeda Camarillo, había declarado que se trataba de puros rumores, pero se confirmó que desde la mañana los pobladores dieron aviso y nadie acudía.
En un primer hecho corroborado, ocurrió un supuesto enfrentamiento por un camino vecinal entre La Vainilla y La Mojonera, en donde fueron encontrados ejecutados 7 hombres que portaban pecheras, chalecos blindados y fusiles de asalto automáticos, así como radios y demás equipo.
Los cuerpos estaban junto a una camioneta color blanco, la cual tenía impactos de bala. Estas personas murieron en un supuesto enfrentamiento contra un grupo rival.
Los hechos sucedieron, según los pobladores, cerca de las 10 de la mañana. Luego casi a la misma hora se reportó la incursión de un grupo armado al poblado de Bagrecitos, en donde 8 pobladores fueron acribillados a tiros en distintas partes de la comunidad.
El grupo de pistoleros llegó al poblado disparando contra algunas viviendas y hombres que alcanzaban a ver. Dos cuerpos quedaron junto a sendas motocicletas en una carretera, al oriente de Bagrecitos.
Un tercer cuerpo fue encontrado en la parte trasera de un domicilio, junto a un baño; el cuarto cadáver estaba un costado de un cerco de la casa donde se encontró la quinta víctima.
La sexta y séptima víctimas estaban dentro de una casa ubicada al lado oriente de la población y octavo hombre asesinado estaba en un montículo de tierra pegado a la carretera.
En la zona había varios casquillos de distintos tipos de arma de fuego, por lo menos fueron identificados 6 calibres distintos de arma larga y corta.
También se localizaron al menos 2 unidades abandonadas con las puertas abiertas y con múltiples impactos de bala en la carrocería y cristales, al parecer propiedad de las víctimas que corrieron por un arroyo para ponerse a salvo.
Se dijo que había rastros de sangre sobre los arroyos y caminos, así como las veredas. Otras personas al parecer corrieron por esos rumbos para ponerse a salvo de la masacre desatada en Bagrecitos.
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